El levamisol se distingue por su eficacia contra gusanos pulmonares y contra la mayoría de los helmintos GI, en particular contra adultos. El levamisol estimula los ganglios simpáticos y parasimpáticos del parásito dando como efecto final la parálisis que hace que el parásito sea expulsado. Se sabe además que el levamisol tiene efecto inmunoestimulante; se cree que restablece la función de las células inmunitarias (principalmente linfocitos T) y estimula la fagocitosis. Estos efectos son evidentes en animales inmunodeprimidos. No actúa contra cestodos ni trematodos. Debido a su margen de seguridad tan estrecho y a su limitada eficacia contra parásitos en equinos, no se usa en esta especie.